Por
Julio Manuel Ovalle Bonilla
Médico y Cirujano
Existen condiciones
especiales que necesitan preparación y entrenamiento, así como el atleta
entrena para lograr una optima condición física y tener un mejor desempeño en
el momento de mayor exigencia , es necesario que la mujer se prepare psicológica y físicamente al tener
la posibilidad o deseo de iniciar con una gesta, de esta forma evitar
complicaciones o falta de rendimiento por parte de su metabolismo lo cual puede dar un lamentable
resultado del embarazo, y exponer la salud de sí misma y del feto.
Más de la mitad de
mujeres embarazadas en nuestro medio refieren no haberlo planeado su estado de
gravidez. En la mayoría de casos, especialmente en las mujeres jóvenes de
nuestro país, con menor nivel académico, sospechan de un embarazo alrededor de
la segunda o tercer semana de retraso menstrual, y buscan atención medica posteriormente a
este periodo, tiempo en el cual ya se podría haber desarrollado un embrión que ya
tiene un corazón que late y un tubo neural consolidado. Aun dando suplementos necesarios al momento
del diagnóstico del embarazo estos son inútiles para prevenir una malformación
fetal ya que estos eran requeridos mucho antes de que la joven siquiera sospechase de la vida en su interior.
Para el buen desarrollo
de un embarazo y su feliz terminación se requieren grandes reservas energéticas
y de nutrientes que son necesarias aun antes de que se de la fecundacion,
vitaminas, proteínas, calorías y minerales que son las bases para evitar
malformaciones fetales como anomalías del tubo neural ( raquisquisis,
mielomeningocele, encefalocele etc). En resumen, la futura madre tiene que
estar en su mejor condición física,nutricional, psicológica y social para
afrontar un embarazo.
Existe un término que
define una práctica poco difundida y conocida por la población, algo que no es costumbre,
pero que estudios internacionales han
demostrado reflejar beneficios en el
binomio maternofetal y en el desenlace por todos esperado de la gravidez; es el
asesoramiento preconcepcional. Son el conjunto de acciones activas que buscan
identificar riesgos biológicos, conductas y prácticas sociales peligrosas para la gesta, y que tienen como objetivo recuperar y mantener
la salud de la madre , o dar tratamiento
si así se requiere para el buen desenlace de la gestación.
Los riesgos aumentan
cuando ya hay enfermedades en futuras madres que se han relacionado con
complicaciones en el embarazo, como lo es la diabetes Mellitus. Idealmente es
necesario tener un buen control del nivel de glicemia antes de la concepción, es tener controlada
la enfermedad antes del embarazo o retrasar el embarazo hasta controlar la patología,
con esto se reduce en 4 veces el riesgo de malformaciones fetales. Iguales
estrategias se obtienen en mujeres con hipertensión arterial, epilepsia ,
fenilcetuniria , anemia, mal nutrición etc.
Investigaciones revelan que en mujeres con riesgos físicos y
en el estilo de vida que recibieron asesoramiento , prevención y tratamiento
antes de embarazarse , el 80 % de ellas dieron a luz a lactantes saludables, a
comparación de solamente el 40 % de
niños sanos de las pacientes que carecieron de asesoría y prevención pre concepcional.
Alrededor del 95% de
mujeres tienen algún antecedente, costumbre o enfermedad que puede ser de
riesgo en un embarazo ,entre ellos, infecciones, patologías agregadas, dietas
inadecuadas, medicamentos, actividades, alcoholismo, exposición a tóxicos y
teratógenos y tabaquismo.
Así que si usted,
considera convertirse en madre, o serlo de nuevo, prepárese planeando junto a un profesional el momento ideal, previniendo y corrigiendo
conductas de riesgo, y estabilizando cualquier patología para tener salud que
ofrecer a la gesta, que el diagnostico de embarazo no sea inesperado y lleno de
riesgos y complicaciones innecesarias. El asesoramiento con el especialista en
obstetricia es ideal para que la mujer pueda disfrutar la experiencia más valiosa de su vida, embarazarse
y convertirse en madre.
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