Por
Kevin Armando Portillo Koberne
José Miguel Salazar Argueta
Médicos y cirujanos
El 10 de mayo se
celebra el día de la madre en Guatemala. En esta fecha también se celebra el día
mundial del Lupus, una enfermedad que curiosamente el 90% de quienes la padecen
son mujeres en edad reproductiva. El Lupus Eritematoso Sistémico (LES) es una
enfermedad autoinmune: significa que el cuerpo crea moléculas, llamadas
auto-anticuerpos, que “atracan” a otros
órganos, tejidos y células. Esta enfermedad comienza a manifestarse entre los 15 y 25 años y nueve de cada 10
pacientes son mujeres según explica el Dr. Mynor Herrera, Jefe de la Unidad de
Reumatología del Hospital Roosevelt.
Debido a que no se trata de una enfermedad que está
confinada a una región del cuerpo, las manifestaciones son diversas y aunque existen
criterios clínicos que pueden orientar al médico y pruebas de laboratorio para
detectar la presencia de auto-anticuerpos, el diagnóstico no es tan sencillo. Muchas
veces, los síntomas y signos dependen de la región del cuerpo que está siendo
más atacada en ese momento, otros aparecerán luego a medida que la enfermedad
avance.
El
sistema nervioso central (SNC), que comprende el cerebro y la médula espinal,
no se escapa a la acción de los auto-anticuerpos. Pueden existir eventos
cerebro-vasculares (entiéndase derrames) que son causa de LES, como también
pueden haber manifestaciones
psiquiátricas como ansiedad, manía y depresión. Se sabe que alrededor de 40% de
la afección al SNC comprenden alteraciones emocionales.
Cuando se habla específicamente de depresión en
estos pacientes surge una pregunta: ¿el paciente está deprimido por enfrentar
la enfermedad, situaciones de la vida cotidiana o sucesos negativos ocurridos
recientemente? O ¿el paciente está deprimido porque hay afección en el cerebro
por parte de auto-anticuerpos lo que causa los síntomas? Se ha estudiado que se
pueden formar auto-anticuerpos que atacan una región del cerebro llamada
circunvolución dentada y el hipocampo. Estas regiones controlan plasticidad
neuronal, memoria, orientación espacial entre otras. Se cree que el daño
directo a las neuronas del cerebro puede provocar depresión.
Se necesitan más estudios para saber si un paciente con
LES y diagnostico de depresión esté realmente deprimido. Para tal motivo,
actualmente se está estudiando la relación entre la presencia de un
auto-anticuerpo llamado anti-NR2 y depresión. Esto traerá grandes oportunidades
de tratamiento ya que se trataría el auto-anticuerpo y no la depresión como
tal.
Un paciente con Lupus puede llevar una vida normal,
con buen pronostico y sobrevida alta, si se realiza un diagnostico certero y a
tiempo y si el paciente cumple con el tratamiento establecido por su médico. Es
por ello que la investigación de las manifestaciones neuro-psiquatricas del
Lupus puede abrir las puertas con el objetivo de encontrar tratamientos
integrales que no solo alivien el problema sino que mejoren la calidad de vida.